La plaza del Mercado de Ste. Catherine es el centro de un conjunto de viviendas surgido en los años previos de la revolución
francesa en sustitución del convento de Ste. Catherine. En un ejercicio de respeto a la memoria histórica la plaza ocupa exactamente
el mismo espacio que ocupaba el claustro del convento. La instalación de una escultura de Chillida y el interés del artista
por ensamblar la pieza en el espacio urbano proporciona la oportunidad de recuperar la idea de claustro, diferenciando el espacio
central con un carácter especial, contiguo pero ajeno al perímetro.

La obra finalmente no se realizó.